Billy Elliot, o el niño que llegó a ser cisne


 Billy Elliot, o el niño que llegó a ser cisne

Sitio Oficial: Universal
País: Reino Unido/ Francia
Idioma: inglés
Fecha de liberación en México: 2 de marzo de 2001
Locaciones de filmado: Canary Wharf Underground Station, Canary Wharf, Isle of Dogs, London, England, UK.


Las metáforas comunes son las mejores,

porque son las únicas verdaderas.

Jorge Luis Borges (1970, p. 77)

Introducción

Existe una gran cantidad de películas que versan sobre la condición del adolescente, de sus ritos de iniciación, de estereotipos y la manera en que el adolescente aprende a vivir en sociedad. A diferencia de otros filmes, que son meras comedias ligeras, cuyo interés es menos profundizar en la problemática del desarrollo del adolescente, que meramente entretener, en esta ocasión se trata un filme serio, profundo, que amerita un análisis profundo del texto cinematográfico.

1. El  protagonista y sus características.

Billy Elliot es un niño de 11 años que vive en la ciudad de North East Durham; un lugar donde la mayoría de los habitantes dependen de las minas de carbón para su supervivencia. El protagonista se presenta de una manera magistral en la primera escena de la cinta donde, curiosamente, sólo aparecen sus manos: delicadas, temblorosas, inseguras. La imagen es, de alguna manera, metonimia de los que es ese niño, y de hecho el filme girará en torno al cómo, a través de una serie de ritos de iniciación, el niño asume una postura sexual, social y familiar, así como una postura ante la vida al tiempo que trata de salir adelante en situaciones adversas, como el haber perdido a su madre, el que su padre se haya vuelto retraído al no poder salir de su duelo, a las carencias económicas que vienen como resultado de la huelga de mineros. Sin embargo, no es esto lo más terrible en la vida de Billy, sino el ambiente en el que se desenvuelve; una constante incapacidad para la comunicación por parte de la familia. Su hermano mayor, por ejemplo, a pesar de que lo ama, lo ignora o maltrata verbalmente la mayor parte del tiempo

2. Los personajes secundarios y su participación en la trama del argumento.

Billy debe ayudar en el cuidado de su abuela senil. La cinta abunda en elementos simbólicos. La abuela es lo más cercano que tiene Billy a una madre. De hecho, esta necesidad de la madre es recurrente en la película. En la casa hay un piano, y sobre el piano el único aspecto hogareño de la familia: las fotos que muestran la familia reunida. El piano (y con él la música) es un símbolo materno, que de alguna manera lleva a Billy a recuperar un paraíso perdido, y quien sirve como una especie de memoria vicaria es la abuela. A manera de ejemplo, en el argumento de repente hay un corte, aparece Fred Astaire bailando, y es gracias a la voz de la abuela que el espectador se entera de que ese actor—bailarín era el favorito de la madre de Billy. La música, la abuela y la muerte (el cementerio) funcionan como las formas que tiene Billy de recuperar a la madre.
            Por otra parte está el aspecto masculino, que mayormente está representado por el padre y por lo paterno; los guantes de box, por ejemplo, son un ejemplo de lo masculino que se hereda; virilidad que debe ser tratada con cuidado y responsabilidad. Este personaje, representante de la clase obrera, demuestra a lo largo de la trama la capacidad de sacrificarse por su hijo y, sin embargo muestra continuamente la incapacidad para comunicarse. En este ambiente de comunicación con sobreentendidos, se insta a Billy para que practique el boxeo, con el propósito de que, de esa forma, a su vez Billy asuma una serie de roles masculinos, ya que se da por obvio que “los muchachos deben practicar el boxeo, el football o la lucha”. Para el padre es tan importante este tipo de socialización, que está dispuesto a usar una fracción del menguado presupuesto familiar en las clases de boxeo; no cuestiona si Billy tiene o no el talento o el deseo de aprender a boxear, ya que se da por obvio que debe asumir ese rol, y con ello el natural desarrollo de su género.

Se puede decir que el estilo educativo del padre  es autoritario, “un estilo restrictivo y punitivo en el que los padres obligan al adolescente a seguir las normas que le imponen y le inculcan el valor del trabajo y el esfuerzo.” (Santrock, J. 2003, p. 128). Este personaje no duda de utilizar la fuerza física como medio de lograr que sus hijos “entren en razón”; ya sea Billy con su deseo de dedicarse al baile, o el hijo mayor Tommy, que desafía su autoridad y decide enfrentarse a la policía.

Así como los padres influyen en los hijos, los hijos influyen en los padres (Wade, C. y Tavris, C., 2002), produciéndose una sociabilización recíproca (Santrock, J., 2003, p.120); conforme se desarrolla la trama se observa que el padre está más dispuesto a demostrar afecto y emoción hacia sus hijos y a su vez los hijos también le expresan su afecto de una manera abierta.

Tommy. Hermano mayor de Billy, que al igual que éste y su padre, continuamente trata de adaptarse a las estresantes circunstancias en las que vive. Este personaje, como suele suceder con los hombres jóvenes (Santrock, J. 2003, p. 215), tiene una clara conciencia de clase que le lleva a identificarse por completo con la clase obrera por medio de la huelga de mineros, a la cual dedica todo su tiempo y energía. Tommy  siente una gran frustración y  enojo por la injusta manera en que el gobierno ha manejado el conflicto minero. Como modo de evasión, escucha música y fuma marihuana. En la escena en que se encuentra con un “rompehuelgas” en el supermercado no sólo se comporta según las expectativas del grupo, sino que se da una perspectiva nueva a Billy acerca del mundo que le rodea, cuando discuten acerca de lo correcto--incorrecto de la huelga; esa crítica a las ideas de clase de la familia serán ahondadas esa misma noche por el discurso de Margaret Tatcher, “la dama de hierro” (que significativamente sustituyó a un varón  en el más importante puesto político inglés), acerca de lo incorrecto de la huelga. El punto no es baladí: en los esquemas mentales que va formando Billy, en los roles que va asumiendo, entra la posibilidad de que, si los hombres de la casa se equivocan en cuanto a ese aspecto de la huelga, muy bien podrían estar equivocados en cuanto al de la masculinidad, por ejemplo. De hecho, de manera muy clara el director de la película nos muestra, después de esa escena, una serie de contraposiciones entre la delicadeza del ballet (que ya practica Billy), y la violencia de la huelga (donde se encuentran su padre y su hermano). De hecho, Billy demuestra no ser muy bueno en su desempeño físico, y al quedar rezagado en una carrera en la escuela, toma atajos en los medios para llegar a los fines deseados. Curiosamente, es en ese momento donde dialoga por primera vez con un amigo con respecto al uso del tutú en sus clases de ballet, con lo que el ballet se instala en una zona de sexualidad intermedia (para el padre y casi todos los hombres representados dentro del film, ballet es sinónimo de homosexualismo), por lo que al haber una confrontación entre el padre y el hijo, aparentemente todo lo que representa el padre se vuelve malo o incorrecto. Departir acerca del ballet lleva a hablar de:
            La Maestra Wilkinson. Ella conoce a Billy casi por casualidad, cuando debe compartir el espacio del gimnasio con las clases de boxeo; no sólo anima a aquél a seguir sus sueños (si bien, de una manera poco ortodoxa), sino que le apoya y enseña que es importante luchar por aquello que ambiciona. Junto con la maestra Wilkinson está su hija, Emily, quien es amiga de Billy, y el esposo de la docente, un personaje alcohólico y decadente, que sirve para presentar otra perspectiva de la huelga, y para mostrar en la maestra un personaje complejo, quien atraviesa por una etapa de insatisfacción, no sólo en su carrera, sino en el matrimonio. De hecho al espectador le queda claro que ella da clases de ballet prácticamente como un sustituto de relaciones maritales satisfactorias. Con ello, para Billy el ballet tomará todavía un significado más complejo. No sólo es la posibilidad de recuperar la madre perdida y cumplir los sueños de la muerta y de su abuela; no sólo es la rebeldía contra los roles impuestos por el padre, o entrar en una zona de sexualidad ambigua, sino que muy bien puede ser sustituto del sexo.
            Amigos de Billy. En la película solamente se observan dos; Emily y un compañero. Emily, quien es hija de la maestra de ballet, anima a Billy a perseguir su sueño de ser bailarín y representa el despertar sexual de la adolescencia, en la que las niñas parecen llevarle muchas millas de ventaja a los niños en relación con la atracción del sexo opuesto. Además de Emily, Billy tiene un amigo que gusta vestirse con ropa de mujer y pintarse los labios. Ambos amigos son copartícipes en tratar de realizar con Billy ritos de iniciación.
            En su obra clásica, Propp (1981, pp. 71-90) habla del rito de iniciación de los jóvenes al acaecer la pubertad. La base mental del rito consiste en creer que “durante las difíciles pruebas de dicho ritual... en las que hace su aprendizaje de los bailes y cantos... aprende todo lo que se consideraba indispensable para la vida [y] ...después el niño muere, su alma es entregada a un animal totémico; después de lo cual el iniciado resucita ya no como niño, sino como un hombre nuevo”. (Propp, 1981, p. 74).
Según el mismo autor (p. 77) este rito se celebra en un lugar sagrado, donde se pueda celebrar la ceremonia en secreto, ceremonia que tiene qué ver no sólo con su iniciación en la vida, sino en muchas maneras con su iniciación sexual. Ambos amigos de Billy tratan de propiciar en él este rito de iniciación en el ámbito del sexo. Por una parte, Emily en su propia recámara (las plumas que revolotean por todas partes y que terminan por cubrirlos, de hecho, evocan a este animal totémico del que se habla); por otra parte su amigo es sorprendido por Billy vestido de mujer y con los labios pintados. (“Mi papá lo hace seguido”, dice el niño, y al final añade: “¿Crees que ser bailarín es mejor que ser minero?”). Como parte del rito de iniciación, también pinta los labios de Billy pero éste, en ninguno de los casos permite ser iniciado. Según Berk, L. (2003), los adolescentes buscan el acercamiento psicológico y comprensión de parte de sus amigos y Billy encuentra esa aceptación incondicional en estos dos personajes.
                Es precisamente en el ring de boxeo, en el lugar de la violencia, donde se da el verdadero rito de iniciación, como lo señala Propp (1981, p. 80): por medio de un toma y daca de objetos, y de un interrogatorio. Entre los objetos se encuentra una carta de su madre, que él debería leer cuando cumpliera los 18 años, vale decir, en la edad en que pasaría a ser mayor de edad; cuando debería dejar de ser adolescente para ser hombre, carta aprendida de memoria: “Siempre estuve contigo en todo momento. Me has llenado de orgullo. Siempre sé sincero. Siempre te querré”.
            Es significativo que sea en ese mismo ring de boxeo cuando el amigo se vista con el tutú y juntos “mancillen” la idea de lo masculino, para de ese modo uno asuma su propio rol y el protagonista se adjudique su propia idea de la masculinidad. No es poco significativo que después de ello el padre llegue y Billy, que antes no pudo bailar, ahora sí baile: ha pasado el rito de iniciación y en el ring, el lugar de lo masculino, no en la casa de sus amigos o la propia, donde se encuentra en su propio territorio y asume su rol.

3. Síntesis del argumento dentro del contexto sociocultural.

La historia se desarrolla en un pueblo minero de Inglaterra en 1984. Trata de las expectativas de un grupo de la clase trabajadora que sufre de privaciones y carencias debido a la huelga minera, y de un niño que desafía lo que su familia y sociedad esperan de él al descubrir su amor por el baile. En este contexto sociocultural, se cuestionan los estereotipos de género (Santrock, J. 2003, p.275), según los cuales los hombres y mujeres solamente deben dedicarse a ciertas actividades.
El padre de Billy está pasando por una crisis muy dura: aunada a la pérdida de su esposa y la adaptación que esto implica para la familia, el padre de Billy siente que su masculinidad es diariamente cuestionada porque no es capaz de proveer a su familia y no recibe ningún reconocimiento por su trabajo. Por si esto fuese poco, Billy desafía la autoridad paterna al expresar interés en el baile, una actividad que el considera “femenina” desobedeciendo sus órdenes y menospreciando su autoridad masculina. 
Por otro lado, Billy también reacciona ante las circunstancias estresantes en las que vive; la incertidumbre y violencia de la huelga minera, la escasez de recursos económicos y la falta de afecto en la familia; pero a diferencia de su hermano mayor, sublima esta energía en el baile en vez de volverse violento o buscar refugio en las drogas. Para Billy, el baile representa un escape y refugio que le permite mantener su autoestima y confianza en sí mismo.

4. desenlace.

Haciendo gala del cine como lo que debería ser (un séptimo arte), Stephen Daldry, el director del filme, juega con el simbolismo en las relaciones espaciales, con la verticalidad: lo que es alto físicamente representará lo excelso, el triunfo. Lo que es bajo, el fracaso, lo menesteroso. Otra manera de escape de la situación de Billy es la horizontalidad: Al final de la obra, Billy logra desplazarse horizontalmente hacia otra ciudad; el padre y el hermano, por medio de un elevador, se hunden en el subsuelo. Más adelante, cuando ellos vayan a verlo, tendrán qué subir por largas escaleras eléctricas: al lograr un medio de expresión, el arte, Billy logra trascender por encima de sus semejantes.

5. Desde qué perspectiva explica el fenómeno de la adolescencia.

Por no citarlo según las normas del APA, no se dirá que en el siglo antepasado George Bernard Shaw dijo que es absurdo preguntarle a un autor una explicación de su obra, ya que esa explicación bien puede ser lo que la obra buscaba.
Sin embargo, a riesgo de caer en lo repetitivo, vale la pena subrayar una vez más que son dos los temas que aborda la cinta: el del rito de iniciación (de índole sexual) en el adolescente, la manera en que aprende a ser hombre o mujer y cómo socialmente se asocian actitudes, valores y formas de vivir en función del género; así como el de la barrera de comunicación que suele darse entre éste y los integrantes del mundo de los adultos. Hay qué considerar que “Los adolescentes viven en un mundo en el que las relaciones que mantienen con sus compañeros y las que mantienen con sus padres están conectadas, en vez de ser dos mundos aparte” (Ladd et al., citado por Santrock, 2003); así como también que “las relaciones con los padres son importantes en el desarrollo adolescente porque actúan como modelos que permanecen a lo largo de la vida, influyendo sobre la construcción de nuevas relaciones” (Santrock, 2003, p. 122).

6. Comentarios:

La actualidad del fenómeno.
            Es cierto que la película nos habla de esa larga serie de pruebas que constituye un  rito de iniciación en el que el protagonista (aquí iba a escribir “como tantos”; en realidad debería decirse “como todo”) adolescente debe asumir su propia sexualidad y el rol de su propio género. Finalmente el tema de esta actividad es la sexualidad en el adolescente. Con eso bastaría para convencer de la actualidad del fenómeno, pero al mismo tiempo el filme aborda un tema más, el de la incapacidad de comunicación entre tanta familia, sobre todo en determinado nivel social. Acaso no esté por de más ser más explícito:
El día que será la prueba en Londres la maestra espera a Billy en el lugar del rito de iniciación; en el cuadrilátero de boxeo. Al no encontrarlo lo busca en su casa, donde se dará una discusión entre la maestra y el hermano mayor, mientras Billy está sobre la mesa (otro tipo de cuadrilátero), donde Billy se niega a expresarse. Se niega a bailar, que es lo que constituye su capacidad de expresión y, de esa manera, asume el mismo rol que el resto de los varones en su familia. En una escena sumamente lograda Billy se nos muestra aprisionado en una casa idéntica a todas, en un baño claustrofóbico, que es símbolo de un sistema social, de la ideología de sus mayores, de su condición económica; prisión de la que sólo encuentra escapatoria por medio del baile, hasta que lo detiene una pared infranqueable: está nevando, y han pasado meses. Esa misma cárcel de incapacidad para comunicarse, esa misma claustrofobia pasa casi todo joven en un mundo donde cada vez más padres consideran que cumplen con su función al meter a sus vástagos a una buena escuela y proveerles de un celular de su gusto.
La dificultad de comunicación se da incluso en la despedida de la abuela. Sin una sola palabra. En el filme, la comunicación abierta se da entre los pares, no con los adultos: cuando su hermano se despide de él en la central de autobuses hay, significativamente, un cristal entre ellos que impide que sus palabras sean escuchadas. Precisamente, liberarles de ese enclaustramiento causado por la incapacidad e comunicación es la función que cada vez más, como se explicará en el siguiente párrafo, corresponde a los docentes.
Cómo aprovecha esto a un profesor.
Se ha hablado de un rito de iniciación. Tal vez no falte quien pregunte, ¿y el animal totémico del que se habló en la cita de Propp y más arriba en este análisis? Billy acompaña a su maestra a Londres. En el camino se escucha El lago de los cisnes¸ de Tchaikovsky. Al narrar la historia, la maestra altera el argumento de la pieza de Tchaikovsky para que cuente su propia historia, y de esa manera el ballet se transforma en la posibilidad, aunque sea por unas horas, de sentirse o de ser libre. Aquí la música de ballet agrega un sema a la complejidad simbólica que a lo largo de la obra va tomando para Billy, y se transforma para éste en un símbolo de liberación.
Cuando Billy es entrevistado en la Escuela Real de Danza, se da el siguiente diálogo, con estas o semejantes palabras:
            --¿Qué fue lo que te hizo interesarte por el Ballet?
            --bailar.
            --¿Qué es lo que sientes cuando bailas?
            --Me siento bien. Estoy rígido, pero cuando inicio siento que olvido todo desaparezco. Siento un cambio en mi cuerpo. Un fuego en mi cuerpo. Siento que vuelo. Como ave. Como electricidad, sí, electricidad.
            De una manera sutil, pero bellamente simbólica, la cinta muestra cómo Billy se transforma de un joven como todos, a precisamente alcanzar esa libertad que deseaba su maestra: la escena final nos muestra a Billy ya adulto (su amigo ha asumido por completo su rol de homosexual y se encuentra en el auditorio sentado junto a su negro sensual), que gracias a la expresión artística, cargada de complejos simbolismos, le ayudan a transformarse en lo que su maestra siempre quiso ser o alcanzar: la libertad. Billy vuela por los aires, ejecutando el papel de su animal totémico, el cisne, interpretando al jefe de la parvada en la obra de Tchaikosky, El lago de los cisnes.
            ¿En qué aprovecha todo esto a un profesor? En este filme la maestra apoya al alumno en su búsqueda por ser auténtico, le ayuda a fortalecer su autoestima y a reconocer la satisfacción que se obtiene en afrontar las dificultades de una manera genuina. Se ha dicho tanto de lo mismo renglones arriba que bien vale la pena ser breve. Hay muchos cisnes cautivos en todo salón de clases. Ellos están esperando ser liberados por la mano de su maestro.

Oscar Pech
Casas Grandes, Chihuahua, marzo de 2005.

Referencias


Berk, L. E. (2003). Child Development, sixth edition. Estados Unidos. Allyn and Bacon.

Borges, J. L. (1970). El informe de Brodie. Madrid: Alianza/Emecé

Daldry, S., /Brenman, G. y Fin, J. (2000). Billy Elliot [Motion Picture]. Burbank, CA. Universal Pictures.

Propp, V. (1981). Las raíces históricas del cuento, tercera edición, Madrid: Editorial fundamentos.

Santrock, J. W. (2003). Psicología del desarrollo en la adolescencia, novena edición. Madrid: McGraw Hill/Interamericana de España.


Wade C. y Tavris, C. (2002). Invitation to  Psychology, second edition. New Jersey, Estados Unidos: Prentice Hall.


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