Las ciudades de Ammoníah y Aarón

 

Íah es una forma abreviada del nombre de Jehová. El doctor Hugh Nibley dijo: “una gran parte de los nombres del Libro de Mormón terminan en-íah e íhah. La misma terminación es peculiar a los nombres Palestinos de la época de Lehi, aunque no son tan comunes en otros períodos.” Esto es, en la época de Lehi había palestinos que no eran hebreos. Los nombres que terminan en íah casi siempre tienen que ver con eso: con personas que no eran descendientes de Lehi, (como Zoram, por ejemplo), o que eran parte del pueblo de Mulek y/o Zarahemla, es decir, acaso podrían ser de la nobleza hebrea, pero no de la nefita-lamanita; son gente que son “del pueblo”.
 
El doctor Nibley continuó: “En la época de Lehi, hubo un nuevo movimiento de renovación que comenzó en Israel liderado por Josías. Estos nombres que terminaban en -íhah en Israel en ese momento eran una forma distinta del nombre de Jehová. Íhah es otra forma de ese Nombre sagrado, el cual también se le encuentra en arameo”.
 
Íah es una forma abreviada del nombre de Jehová. El doctor Hugh Nibley dijo: “una gran parte de los nombres del Libro de Mormón terminan en-íah e íhah. La misma terminación es peculiar a los nombres Palestinos de la época de Lehi, aunque no son tan comunes en otros períodos.” Esto es, en la época de Lehi había palestinos que no eran hebreos. Los nombres que terminan en íah casi siempre tienen que ver con eso: con personas que no eran descendientes de Lehi, (como Zoram, por ejemplo), o que eran parte del pueblo de Mulek y/o Zarahemla, es decir, acaso podrían ser de la nobleza hebrea, pero no de la nefita-lamanita; son gente que son “del pueblo”.
 
El doctor Nibley continuó: “En la época de Lehi, hubo un nuevo movimiento de renovación que comenzó en Israel liderado por Josías. Estos nombres que terminaban en -íhah en Israel en ese momento eran una forma distinta del nombre de Jehová. Íhah es otra forma de ese Nombre sagrado, el cual también se le encuentra en arameo”.
 
En el Onomasticón del Libro de Mormón encuentro lo siguiente, en la entrada correspondiente a “Aarón”:
 
1. Era un jaredita descendiente de Heth, quien vivió toda su vida en cautiverio (Éter 1: 15-16; 10:31).
2. Nefita hijo de Mosíah, quien vivió en el S. I a.C. (Mosíah 27:34).
3. Rey lamanita del S. IV d.C. (Mormón 2:9).
4. Ciudad nefita cerca de Ammoníah y Nefíah (Alma 8:13)
 
Y es precisamente por los puntos 1 y 4 que inicio esta entrada con el postfijo -íah. ¿De dónde viene la palabra “Aarón”? Uno se deja llevar por la navaja de Occam y piensa de inmediato en el hermano de Moisés, salvo que:
 
A. Moisés y Aarón nacieron en Egipto, en un pueblo que había olvidado sus raíces y vivían en apostasía. El nombre no es hebreo, pues, y no hay persona que se atreva a dar una etimología de ese nombre bíblico.
B. En El Libro de Mormón, el nombre de Aarón jamás está relacionado con el hermano de Moisés en ninguna manera.
C. El nombre de Aarón fue, antes que todo, mucho mucho antes que el nombre del hermano de Moisés, un nombre jaredita (circa 2,000 a.C.) y simplemente por eso, es muy difícil dar una etimología del mismo.
 
De acuerdo con el doctor Ran Zadok, a un lado del postfijo -ōn que da la terminación típica de la formación del nombre, la etimología hebrea en realidad está basada en en el egipcio ʾhr, lo cual nos lleva a *ʾār (de la raíz ʾWR, o ʾYR “dador de luz”) así como con el postfijo -rhm (como en ʾAbrāhām) esto es, rām, lo cual es un confirmación de que su significado se algo así como “aquel de quien surge la luz.” No deja de ser sumamente significativo que en el capítulo uno del Libro de Abraham, el cual nos habla de sus días en la Ur de los caldeos, se menciona que allí se adoraban los dioses de Egipto y había sacerdotes egipcios en Babilonia: por eso no nos sorprende que el mismo nombre de Abraham tenga raíz egipcia.
 
Los jareditas venían específicamente de Babel, de la gran torre, y el nombre de Aarón venía con ellos. ¿Pero cómo pasa de la cultura jaredita, a la cultura nefita? El doctor Hugh Nibley señaló que “El hecho de que los pesos y las medidas nefitas llevaran nombre jaredita, indica un largo traslape cultural”, ya sea con los nefitas, o con la gente de Zarahemla. Esto es muy significativo: los tres principales anticristos nefitas tenían nombre jaredita, o de raíz jaredita (Sherem, Nehor, Korihor). La influencia cultural jaredita, beneficiosa y refinada, espiritualmente siempre fue un lastre en la dignidad y la vida espiritual de los nefitas. Creo que podemos decir que la influencia jaredita entre los nefitas era de un refinamiento intelectual que los alejaba de la fe y los llevaba al mundo del materialismo, a las supercherías sacerdotales, así como a la satisfacción de la mente carnal. La influencia jaredita también suele estar ligada a la idolatría y a la hechicería; a la magia y los encantamientos. De hecho, John L. Sorenson alguna vez hizo el cuestionamiento:
 
“Uno se pregunta qué consideraciones llevaron a Alma hijo a dar a dos de sus hijos nombres jareditas: Shiblón y Coriantón… Es posible que ellos hayan nacido y recibieron sus nombres durante la fase de idolatría de su padre (véase Mosíah 27:8). Yo supongo que los cultos idólatras en los cuales él se vio envuelto eran antiguos, y tenían su raíz en la cultura jaredita. Podemos suponer que eran comunes en la cultura nefita, en un sentido amplio, gracias a la transmisión de elementos culturales que llegaron a los nefitas a través del pueblo de Zarahemla”.
 
Por lo pronto, cada vez que hablamos de la ciudad de Aarón, debemos saber que hablamos de un lugar poco al norte de la tierra de Zarahemla, que fue parte de la cultura jaredita (posteriormente poblado por nefitas) y que, por lo mismo, muy probablemente quedaría en Tabasco, norte de Chiapas, o sur de Veracruz.


https://static.wixstatic.com/media/5008d0_712a5bbbbe584e7581f2c545df202b58~mv2.jpg/v1/fill/w_1000,h_1395,al_c,q_90,usm_0.66_1.00_0.01/5008d0_712a5bbbbe584e7581f2c545df202b58~mv2.jpg

Comentarios